FIESTAS DE SAN RAFAEL

Dicen que, a pesar de ser
San Rafael, nuestro Patrón,
nuestro Ilustre Ayuntamiento
nada organiza en su honor;
limitándose sus fiestas
a una procesión sencilla,
en la que, Eusebio, a su paso,
suele tirar peladillas.

Dan como causa y razón
de tal desidia y miseria,
con que se festeja al Santo,
lo reciente de la Feria,
de la que sale la gente
ahíta de disfrutar,
y sale con buen quebranto
la Hacienda Municipal.

A pesar de ello, no es justo
dejar a San Rafael,
con tan marcado desprecio,
en olvido tan cruel…
Pues, ¿no merece un Patrón,
que en el santoral destaca,
que se celebre su día,
siquiera, con una traca?
¿Qué haya diana, cohetes
y música a todas horas,
y que se organicen bailes
a base de animadoras?
Para tales diversiones,
con el que quiera me apuesto,
que existe consignación
bastante, en el Presupuesto.
Pues, desde tiempos remotos
consigna nuestro Concejo
crédito, para atender,
de su Patrón, los festejos.

Pero, es que aunque así no fuera,
para hacer tales honores,
se podría recurrir
a esa “peña” de señores,
que con tanta esplendidez
se mostraron altruistas
para contratar artistas,
pues, todos ellos darían
dinero, con mil amores,
para volver a traer
a Cari y María Dolores.

Todo menos consentir
que sea nuestro Patrón
menos que el de Cordovilla,
el de Isso o Agramón.

El glorioso San Rafael
merece mejores fiestas,
por ello, quedan aquí
consignadas las protestas
por verlo tan olvidado,
pese a su merecimiento…

Lo que nos hace exclamar:
Que esto sea así…

LOLA MENTO