EL CASINO CULTURAL
Día de publicación
21 Julio 1956Publicado en
La Voz de AlbaceteCedente
Agustín Cifuentes- Alejandro Tomás Ibáñez (ATOMI)
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Dicen que existe en Hellín
un confortable local,
bautizado con el nombre
de CASINO CULTURAL.
Con bellos y amplios salones,
muebles cómodos y ricos,
y hasta con peluquería,
aunque está en un “rinconcico”.
Con un atento servicio
y terraza colosal,
y situado nada menos
que en el centro del RABAL.
Y, no obstante su confort,
su elegancia y señorío,
a cualquier hora, el salón
se encuentra casi vacío.
Y, mientras está desierta
la terraza del Casino,
verás que están rebosando
las de Los Cuatro Caminos.
¿Qué es lo que puede pasar
para que, incluso los socios,
se marchen a otro lugar
para distraer sus ocios?
Según me dice un conspicuo,
la cosa es muy natural,
pues resulta intolerable
que “un Casino Cultural”
en su ya larga existencia,
ni procuró, ni procura
hacer nada que redunde
en favor de la Cultura.
Ni un recital, ni un concierto,
ni charlas, ni exposiciones,
ni coloquios de altos vuelos,
ni veladas, ni audiciones,
ni una clase de cultura
artística, ni una beca,
ni una sala de lectura,
ni una mala Biblioteca…
es decir que solo allí,
satisfacen sus anhelos
los que sienten afición
por el tute o el chamelo.
En un centro que esté ausente,
música, ciencias y el arte,
resulta que la Cultura
no ves por ninguna parte.
Y viene a ser un sarcasmo
difícil de tolerar,
llamarle pomposamente
un “Casino Cultural”.
Yo creo sinceramente,
que la Junta Directiva,
debía tomar al punto,
algunas iniciativas,
que en orden a la Cultura
de al Casino renombre,
pues es sabido que no
solo de pan vive el hombre…
Y está Hellín necesitado,
de tener con prontitud,
Centros en los que se ilustre
y aprenda la juventud,
para ver si así logramos
que surjan, por todas partes,
hellineros destacados
en todas las Bellas Artes.
Como iniciación brillante
en actividades tales,
¿No estaría bien en Feria
dar unos Juegos Florales?
Si atienden estos consejos,
me quedaré muy contento.
Si no tendré que decir
nuevamenteLO LAMENTO