Destacó, desde muy joven
como elemento dinámico,
como poeta, orador
y perfecto actor dramático.
Por su genio bullicioso,
le apodaron en Hellín
con nombre del personaje
que creó Pérez Lugín,
personaje muy sagaz
en cuyas "tretas" se apoya
el relato novelesco
de LA CASA DE LA TRQYA.
Como era listo, estudioso,
aun en muy temprana edad
opositó y sacó plaza
de funcionario postal.
Mas. como de empleado
ganaba poco dinero,
como pluriempleo entró
en el negocio espartero;
y en él, como por barbecho,
sin el más leve fracaso,
enseguida se abrió paso
consiguiendo honra y provecho.
Ya en tan brillante camino
con tesón y simpatía,
logró ser, por su valía,
Presidente del Casino.
Y sin haber titubeos,
pues, merecía la cosa,
al jubilarse Espinosa
quedó de Jefe, en Correos.
Es hombre culto y dinámico,
discutiendo es muy fogoso
y, aunque a veces se acalora
nunca resulta antipático.
Y a pesar de que amilana
viendole tan impulsivo,
es bueno e inofensivo
y vive en paz OCTIVIANA.
JERINGUIQUE