Es simpático, jovial,
alegre y dicharachero;
y, aun cuando ya es cincuentón,
el hombre sigue soltero.
Mas, aún tiene buen partido
como atrayente otoñal,
sobre todo, cuando sale
vestido de Concejal;
pues, su impoluta shariana
llama siempre la atención
cuando desfila, solemne,
en alguna procesión.
Siempre está de buen humor;
escribe con eficacia,
y hasta en su propio trabajo
sale a relucir "La Gracia"
Viejas costumbres de Hellín
y rincones hellineros
describe y publica, a veces,
con la firma “RABALERO”.
Su nombre pocos lo saben,
pues, desde su juventud
le nombran por un apodo
dulce, como un PITI…SU.
JERINGUIQUE